Cuando una pyme o un negocio local decide dar el paso hacia el mundo digital, una de las primeras decisiones que se enfrenta es elegir qué tipo de presencia online necesita. Y es aquí donde surge una de las preguntas más frecuentes en cualquier reunión con un cliente: ¿necesito una página web completa o me basta con una landing page?
A pesar de que ambos formatos se construyen con los mismos elementos básicos —textos, imágenes, formularios— su finalidad, estructura y estrategia son totalmente diferentes. Tomar esta decisión sin entender bien las diferencias puede llevar a invertir tiempo y dinero en algo que no cumple con los objetivos del negocio.
Qué es una landing page
Una landing page, también conocida como página de aterrizaje, es un recurso enfocado a la conversión. No está pensada para navegar ni para contar toda la historia de tu empresa, sino para guiar al usuario hacia una única acción: rellenar un formulario, suscribirse, descargar algo o realizar una compra específica. Todo el diseño gira en torno a esa meta.

Por eso, es habitual que no tenga menú de navegación, ni enlaces que saquen al visitante de la página. La atención se centra en el mensaje, en una propuesta de valor concreta y en un llamado a la acción claro.
Este tipo de páginas es especialmente útil cuando se hace publicidad en Google Ads o redes sociales. Por ejemplo, si estás promocionando un curso de fotografía en Instagram, no tiene sentido enviar a los usuarios a tu web general donde hay información sobre otros servicios. Lo ideal es dirigirlos a una landing específica del curso. Un buen ejemplo de esto es esta landing de Disney+ donde todo está centrado en captar suscriptores.
¿Se puede hacer SEO con una landing page?
Sí, se puede hacer SEO con una landing page, pero con matices. Al tener una estructura limitada y pocas oportunidades de enlazado interno, posicionar una landing en Google es más difícil que con una web completa. Las landing pages suelen estar pensadas para tráfico de pago o campañas concretas, no para competir en resultados orgánicos de palabras clave amplias. Sin embargo, si está bien optimizada, con un contenido sólido, una keyword clara, tiempo de carga rápido y alojada bajo un dominio con autoridad, puede posicionar para búsquedas específicas. Aun así, si tu objetivo es atraer visitas orgánicas de forma constante, lo más recomendable es combinar la landing con una estrategia SEO más amplia basada en una web con arquitectura de contenidos.

Qué es una página web (y por qué no es lo mismo)
Una página web, en cambio, es una herramienta más amplia. Sirve para presentar tu negocio en Internet, generar confianza, posicionarte en buscadores y explicar todo lo que haces. Es la carta de presentación completa de tu empresa, y suele incluir varias secciones como inicio, servicios, quiénes somos, contacto y, si se quiere trabajar el posicionamiento, también un blog.
A diferencia de la landing, una web no tiene un único objetivo de conversión directa, sino que abarca un conjunto de objetivos a medio y largo plazo: generar autoridad, mejorar tu visibilidad local o dar información útil que ayude a convertir en fases posteriores del proceso de compra.
Una página como la de Nomadlist es un buen ejemplo de una web completa. Tiene distintas secciones, funcionalidades, información extensa y una comunidad activa. Es más que una simple landing; es una plataforma con vida propia.

Entonces, ¿cuál necesito para mi negocio?
Aquí es donde entra en juego la estrategia. Si estás lanzando un producto concreto, haciendo una campaña temporal o necesitas validar una idea de negocio, probablemente una landing page sea más eficaz. Pero si lo que quieres es tener una presencia digital estable, captar clientes por buscadores y ofrecer una visión global de tu empresa, necesitas una web.
El problema surge cuando las decisiones se toman únicamente por precio. Es habitual que muchos pequeños negocios opten por una landing page porque cuesta menos, sin valorar si les va a servir realmente. El resultado es una página que no refleja quiénes son, no posiciona en Google y no construye confianza.
Como agencia especializada en desarrollo web en WordPress, siempre aconsejamos pensar a medio plazo. A veces una landing es suficiente como punto de partida, pero incluso en ese caso es importante que esté bien diseñada y pensada para crecer. WordPress permite escalar de una landing a una web más completa fácilmente, sin tener que empezar de cero.

El mejor CMS para crear tu página: WordPress
En este punto, cabe destacar otro aspecto fundamental: la elección del CMS (Content Management System). Aquí no hay debate posible: WordPress es el mejor CMS para crear páginas web, especialmente si eres una pyme o un negocio local.
No solo es el más utilizado del mundo, sino que ofrece flexibilidad, escalabilidad y un ecosistema enorme de plugins y plantillas que permiten adaptarse a cualquier necesidad. Desde una simple landing hasta una tienda online o un blog de contenidos, WordPress lo hace posible sin grandes complicaciones.

Además, es un sistema amigable para el SEO, lo que facilita que tu página aparezca en los resultados de Google sin necesidad de grandes inversiones iniciales. Y lo más importante: puedes gestionarlo tú mismo sin depender de terceros para cada mínimo cambio.
¿Y si quiero las dos cosas?
Esta es otra duda frecuente. Muchos negocios necesitan una web y, además, varias landing pages para campañas concretas. En ese caso, lo ideal es que la web corporativa esté bien estructurada y que las landing estén integradas dentro del mismo dominio, aprovechando la autoridad de la web principal.

WordPress permite gestionar esto de forma sencilla. Puedes tener una página principal con tus servicios y, al mismo tiempo, crear páginas independientes para campañas, productos o promociones. Todo bajo una misma instalación y con una misma estrategia de marca.
Por qué la elección correcta importa (más allá del diseño)
Una landing bien pensada puede tener una tasa de conversión altísima, pero si no está respaldada por una estrategia de marca sólida, no genera confianza. Y una web completa puede dar una imagen profesional, pero si no tiene llamadas a la acción claras, puede que no convierta.
Por eso, más allá de la estructura técnica o el diseño, lo importante es que ambas opciones —landing page y página web— estén alineadas con tus objetivos de negocio. No se trata solo de estar en Internet, sino de hacerlo con sentido.

Al final, elegir entre una landing page y una página web no debería depender de cuánto cuesta cada una, sino de qué esperas conseguir con tu presencia online. Si tienes claro tu objetivo, la elección será mucho más sencilla.
En TuredaccionSEO llevamos años ayudando a pymes y negocios locales a decidir qué tipo de web necesitan, desarrollando soluciones personalizadas en WordPress que no solo se ven bien, sino que funcionan. Si estás valorando tu próximo paso digital, te invitamos a visitar nuestro servicio de desarrollo WordPress a medida y ver cómo podemos ayudarte.